El profeta Jonás

El profeta Jonás

Muchos conocen la historia de la biblia del Profeta Jonás. La Biblia dice que en aquel tiempo vino la palabra de Jehová a este siervo de Dios, para llevar un mensaje a una ciudad llamada Nínive, capital de Asiria, que ahora sería en Iraq. En aquel entonces, la maldad había subido a su límite, entonces Jehová habló al Profeta Jonás para que fuese a esa ciudad y trajese un mensaje muy perturbador.

Idolatría y crueldad de Nínive

Nínive practicaba la idolatría y adoraba a otros dioses, como Astoret, un dios femenino de la guerra de los cananeos. Los ninivitas eran crueles y sanguinarios de rapiña. Jehová, el Dios de los hebreos mencionado en la Biblia, decidió hacer juicio para traer fin a este mal.

La Ciudad de Nínive

Y la Biblia dice que el Profeta Jonás finalmente emprendió su camino hacia esa ciudad, que era de 60 kilómetros de anchura después de un viaje largo, y entró por sus puertas; la Biblia dice que era una ciudad de tres días de viaje para cruzarla a pie.

Los ninivitas se distinguían por su cultura y vestimenta parecida a los babilonios, por lo que al ver a un hebreo entrar por sus puertas, claramente sabían quién era por su vestimenta.

En aquellos tiempos, el pueblo hebreo tenía mucha consideración y seriedad porque sabían que cuando un Profeta entraba por una ciudad de su país, generalmente era para llevar a cabo juicios, por lo que temían la visita de un Profeta.

Cuando llegó el Profeta Jonás

Entonces, cuando llegó el Profeta Jonás, a la ciudad, empezó a pregonar contra ella el mensaje de destrucción que Jehová Dios le había mandado traer, y uno de los detalles, es que el Profeta Jonás, nunca llegó diciendo Jehová Dios te ama, Jehová Dios te acepta tal como eres, Jehová Dios, es paciente y solo ve lo de adentro, lo de afuera no importa, aunque estas expresiones tienen su lugar y su momento, pero para las personas adecuadas, El Profeta Jonás solo decía “de aquí a 40 días Nínive será destruida” solo 8 palabras repitió hasta que cruzó toda la ciudad en 3 días.

El profeta no tuvo que suavizar ningún mensaje, como el día de hoy lo hacen muchos Predicadores y Profetas autonombrados por no ofender, y no hay ninguna disciplina en absoluto, todo es azucarar la palabra de Dios cuando la Biblia dice que somos la sal de la tierra. El Profeta Jonás no tuvo que hacer nada de eso, fue un mensaje directo, sin adornos y fíjate lo que sucedió.

El arrepentimiento de Nínive

libro de Jonás 3:6-10 Y llegó la noticia hasta el rey de Nínive, y se levantó de su silla, se despojó de su vestido, y se cubrió de cilicio, y se sentó sobre ceniza. E hizo proclamar y anunciar en Nínive, por mandato del rey y de sus grandes, diciendo: Hombres y animales, bueyes y ovejas, no gusten cosa alguna; no se les dé alimento, ni beban agua; sino cúbranse de cilicio, hombres y animales, y clamen a Dios fuertemente, y conviértase cada uno de su mal camino, de la rapiña que hay en sus manos. ¿Quién sabe si se volverá y se arrepentirá Dios, y se apartará del ardor de su ira, y no pereceremos?

10 Y vio Dios lo que hicieron, que se convirtieron de su mal camino; y se arrepintió del mal que había dicho que les haría, y no lo hizo.

Conclusión y Reflexión

Sí, pensamos y revisamos un poco y descubrimos que en aquel entonces la ciudad estaba llena de tanta maldad, idolatría, crueldad y pecados inmorales. La diosa Astorest era una diosa de fertilidad y amor sexual y tenía dos identidades, podía ser masculino o femenino. Este dios prostituía a las mujeres, etc.

En el tiempo del llamado a Nínive, el profeta Jonás radicó como en el 760 A.C. como 250 años después del reinado del Rey David, ahora el tiempo del pueblo hebreo en Egipto fue en 1543-1292 A.C. Cuando Jehová Dios ejecutó ese juicio terrible sobre los egipcios, destabilizando toda la nación, dejándola en ruinas, entonces las naciones de sus alrededores se enteraron de lo que había hecho el Dios de los hebreos a Egipto, con sus plagas, hasta el tiempo de los ninivitas.

Si vemos más en profundidad, aunque los ninivitas eran idólatras y sanguinarios seguidores de otros dioses, sabían quién era Jehová, el único Dios verdadero, porque el juicio que trajo sobre Egipto, la historia se extendió por todo el mundo, pero el hombre siempre se va en pos de otros dioses u otra cosa que se parezca a Dios u otra cosa que no sea Dios. Entonces podemos ver qué rápido dejaron la idólatra esta ciudad de 120 000 habitantes, no pasó ni un mes y hasta los animales obligaron a ayunar con ellos, y la vestimenta cambiaron a silicio, para todos los que dicen que el vestir no tiene nada que ver, cuando una persona ejecuta una conversión total a Dios, no necesita que le estén predicando de cómo vestir apropiadamente para agradar a Dios, solo maneja eso con el discernimiento del Espíritu Santo, sin ningún problema.

Y entonces toda una ciudad junto con su Rey ayunó y se convirtió a Dios. Cuando llega el juicio de Dios, no importa qué religión tengas, en ese entonces vas a reconocer quién es el verdadero Dios. En aquel día de la ira, la Biblia dice que toda rodia se doblara y toda lengua confesara, que Jesucristo es el Señor. Ese día no va a importar qué creencia tengas, todo el mundo va a reconocer que Jesucristo es Dios.

En conclusión, la Biblia dice que los ninivitas de ese tiempo, van a juzgar en el día del juicio, El que se humilla delante de Dios, Dios lo engrandece. Ven a Jesucristo, acéptalo en tu corazón y vive la palabra del verdadero Dios, antes de que sea muy tarde, porque viene un gran juicio a la tierra y nadie podrá escapar de la ira venidera.

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